El modelo del cultivo del olivar basado en la calidad del aceite está impulsando el turismo rural de Almería y ayudando a frenar el despoblamiento de sus pueblos de interior.

Almería no es que sea la provincia andaluza más conocida por sus grandes explotaciones de olivos, pero gracias a un nuevo modelo de producción que se está extendiendo por toda la provincia, estamos metiéndonos de lleno en este mundo consiguiendo un gran prestigio en la producción de aceite de oliva virgen extra de calidad. Este nuevo modelo radica fundamentalmente en la calidad del aceite, ya denominados muchos de ellos “aceite gourmet”.

Pero la producción y promoción del cultivo del olivar además de generar empleo en zonas rurales con problemas de despoblación, está contribuyendo a la sostenibilidad de estos espacios naturales. Primero, porque se están creando alrededor actividades como el turismo rural y la gastronomía, con visitas a almazaras y elaboración de platos basados en el AOVE, y enmarcados en el movimiento “slow life”, que busca un turismo tranquilo que respeta las tradiciones y el medio ambiente.
En segundo lugar, se han repoblado con olivos grandes extensiones de terreno que estaban abandonados y en tercer lugar se fomenta un estilo de vida saludable enmarcado en la dieta mediterránea.

El nuevo modelo abarca la comercialización, basada en la creación de una marca de calidad destinada a clientes que buscan la salud en la alimentación, centrándose la venta de los mejores aceites en las tiendas gourmet y el canal online.

Fuente: ecoturismo.com

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